La técnica de PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa) es una técnica de biología molecular que se basa en la amplificación de una secuencia de ADN determinada. Es ampliamente usada en medicina clínica e investigación desde el diagnóstico de enfermedades hasta la detección de patógenos, entre otras aplicaciones.
 
Imita el proceso natural de replicación (proceso en el que se duplica el ADN durante la división celular) que ocurre en nuestras células, pero in vitro (en un tubo de laboratorio). 
 
Los ingredientes necesarios para esta reacción son los siguientes:

  • Molécula de ADN de interés. Es la secuencia de ADN que queremos amplificar. Actúa como cadena molde. 
  •  Cebadores (o primers). Son cortas secuencias de ADN específicas y complementarias a los extremos de nuestra molécula de ADN de interés, determinando así la región que queremos amplificar. 
  • ADN polimerasa. Es la enzima encargada de realizar las copias de ADN (amplificación). 
  •  Nucleótidos. Son las cuatro bases que conforman el ADN: adenina (A), citosina (C), guanina (G) y timina (T). Serían como el “abecedario” del ADN. 
 
Estos elementos son añadidos en un mismo tubo de laboratorio e introducidos en la máquina PCR (denominada termociclador) donde tiene lugar la amplificación en 3 simples pasos:

  1. Desnaturalización. Las dos cadenas de ADN se separan.
  2. Alineamiento o unión del cebador. Los cebadores se unen al ADN de interés. 
  3. Elongación o extensión. Se sintetizan nuevas copias del ADN de interés, añadiendo nucleótidos según la cadena molde. 
 
Estos tres pasos constituyen un ciclo de PCR. Tras cada ciclo, se duplica la cadena de ADN de interés y estos productos servirán también como molde para el siguiente ciclo. De tal modo que la amplificación es exponencial, se obtiene grandes cantidades de ADN partiendo de pequeñas cantidades del mismo. 
 
Como el material genético del SARS-CoV-2 es ARN, se debe incluir un paso previo a la PCR, que se denomina retrotranscripción y consiste en convertir el ARN en ADN. Es una reacción natural que utilizan los virus ARN para tomar control de nuestras células convirtiéndolas en fábricas de virus. 
 
Para ello, se necesita la enzima transcriptasa inversa que convierte la cadena de ARN en una cadena ADN, denominada ADN copia (ADNc), a partir de la cual, se realizará la PCR convencional. Este tipo de PCR se denomina RT-PCR (Retrotranscripción – Reacción en Cadena de la Polimerasa).
 
En general, la PCR es una prueba que tiene ciertas ventajas:
     -  Es una técnica simple y rápida.
     -  Tiene una alta sensibilidad y especificidad. 
 
Sin embargo, también presenta limitaciones:
      -  Al ser altamente sensible, cualquier contaminación de la muestra puede producir resultados erróneos. 
      -  Requiere información previa de la secuencia a amplificar.
 
Gracias a esta técnica se puede confirmar la presencia de SARS-CoV-2 en el momento de la toma de la muestra del paciente.